Recientemente, los agentes del orden han estado elaborando un plan de presión sobre las empresas: inician procedimientos penales y comienzan a demostrar activamente al propietario y a la dirección que los tienen bajo control.
Comienzan los permanentes se reciben citaciones para interrogatorio, cartas exigiendo presentar documentos, confirmar relaciones comerciales, convocar a todos los empleados y también acosar a las contrapartes con constantes llamadas y exigencias.. Pero lo principal es que nadie es sospechoso de haber cometido actos ilegales.
Es decir, está claro que el caso es contra una empresa concreta, pero oficialmente no hay reclamaciones. ¿Qué hacer en este caso?
Los cambios introducidos en la ley en 2018 permiten proteger los derechos de las empresas ante los tribunales incluso en una etapa tan incierta de la investigación. Para ello, es necesario recopilar pruebas de una investigación sistemática y de largo plazo (citaciones, citaciones, demandas) y acudir al tribunal exigiendo que se complete la investigación del caso.
Luego de la decisión del tribunal, la investigación tendrá 2 opciones, ya sea presentar cargos específicos, o cerrar el caso.
Por ejemplo, esta misma herramienta fue utilizada en 2018 por la defensa de la empresa YouControl para cerrar el proceso penal por supuesta interferencia en el funcionamiento de los sistemas electrónicos, que fue llevado a cabo activamente por el SBU.